El gran inquisidor

El dialogo del gran Inquisidor se trata sobre una conversación que tienen dos hermanos entre ellos Iván que le está contando un poema a su hermano Aliocha. El poema que cuenta Iván trata sobre la venida de Jesús al mundo en el siglo XVI específicamente en Sevilla, España. En esta venida Jesús vuelve a ser capturado pero esta vez por el cardenal que ostentaba el cargo de gran inquisidor de la cuidad, quién lo sentencia a morir en la hoguera al siguiente día. Al apresarlo, el Inquisidor visita a Jesús para tener una charla con él. En esta conversación el gran inquisidor le pregunta a este prisionero si es realmente Jesús y el porque de su venida al mundo. Ante estas preguntas Jesús no responde ni una sola palabra. El gran inquisidor continúa hablando y le dice que su venida solo va a trastornar a la gente pues lo que Él había dicho siglos antes: “Quiero que seáis libres”, es lo peor que le ha pasado a la humanidad. El viejo inquisidor dice que esa libertad del hombre le ha costado cara a la Iglesia y que ellos tras esos quince siglos han logrado instaurar la libertado como a ellos les conviene, han suprimido la libertad para hacer a los hombres felices y todo lo han logrado en su nombre. Es un diálogo en donde le reprocha su manera de actuar pues rechazó el único medio de hacer felices a los hombres y todo por haber rechazado las tres tentaciones que le hizo el diablo en el Desierto. El gran inquisidor dice que el milagro más autentico y magnifico que ha habido en la tierra ha sido el de las tres tentaciones, porque en estas tres proposiciones se resume y se predice toda la historia futura de la humanidad y que todo esto se ha cumplido al pie de la letra quince siglos después. Con la primera tentación Jesús no quiso privar al hombre de la libertad pero lo que el inquisidor le dice es que por este rechazo los hombres se volverán contra Él pues lo que ellos necesitan es que se los alimente para poder exigirles que sean virtuosos.